Con más de 170.000 contagios a día de hoy en más de 150 países, el COVID-19 sigue expandiéndose y con él una creciente preocupación por la salud colectiva. Aunque sus efectos van más allá. El Coronavirus no solo afecta a aquellos que se contagian. La preocupación que está causando y las medidas tomadas por los […]
Con más de 170.000 contagios a día de hoy en más de 150 países, el COVID-19 sigue expandiéndose y con él una creciente preocupación por la salud colectiva. Aunque sus efectos van más allá.
El Coronavirus no solo afecta a aquellos que se contagian. La preocupación que está causando y las medidas tomadas por los gobiernos podrán generar grandes pérdidas económicas en la mayoría de mercados internacionales.
Se prevé que se vean afectados 5 millones de negocios alrededor del mundo, en parte como consecuencia de la expansión ocurrida del virus en China. Una gran parte de las empresas cuentan con proveedores del país asiático, otros por el cambio de hábitos de consumo que generan este tipo de sucesos o del cierre de fronteras.
No es la primer vez que una epidemia de este tipo sacude la economía internacional. Ya ocurrió a gran escala con el SARS y, de manera menos notoria, con el MERS.
En 2003 el SARS, de la misma familia que el actual COVID-19 y con unos efectos parecidos, se expandió por China reduciendo la tasa anual de crecimiento en ventas del sector del retail del 7% al 3% durante los meses de marzo y mayo. Posteriormente, entre mayo y agosto, el sector recuperó la situación previa y acabó estabilizándose con el final de la epidemia.
Algo parecido ocurrió el año 2015 en Corea del Sur con el MERS. El sector del retail bajó su crecimiento anual del 5% a menos de un 1% desde mayo hasta agosto. Tras un famoso festival celebrado en el país, en octubre se culminó la rápida recuperación comercial que elevó el crecimiento hasta el 8%. Más tarde, con el final de la epidemia, el sector acabó por estabilizarse sobre el 5%.
Se desconoce hasta dónde puede llegar esta situación pero, mediante estos ejemplos, se pueden apreciar ciertas tendencias que nos permitan imaginar el futuro cercano de nuestros sectores.
Por último, debemos añadir que esta crisis podría suponer una aceleración en la transformación digital en el comercio minorista i una oportunidad para reforzar la confianza del cliente de cara al futuro.
Fuente:
https://losspreventionmedia.com/the-coronavirus-and-its-predictable-future-for-retail/
https://www.dnb.com/perspectives/supply-chain/wuhan-coronavirus-business-impact.html