Hablar de comunidades seguras nos remonta al reto y trabajo que tienen por delante las autoridades de todos los países para mitigar los delitos en sus regiones, dando un sentido de seguridad a su población. Sin embargo, esta construcción no recae solamente en las autoridades, es algo en lo que todos tenemos una participación y […]
Hablar de comunidades seguras nos remonta al reto y trabajo que tienen por delante las autoridades de todos los países para mitigar los delitos en sus regiones, dando un sentido de seguridad a su población. Sin embargo, esta construcción no recae solamente en las autoridades, es algo en lo que todos tenemos una participación y las empresas juegan un papel crucial.
Durante los 18 años de operación de ALTO, hemos entendido que para construir una comunidad segura es importante poner a las personas en el centro del servicio, por esto nuestro modelo, basado en la prevención, capacitación y disociación que se adapta a las necesidades de cada industria, dando tres beneficios principales:
- 1. Generar estrategias para prevenir delitos.
- 2. Crear planes de acción para dar seguridad a empleados, proveedores y clientes.
- 3. Contar con equipos capacitados para disuadir bandas delictivas.
Construir una comunidad segura empieza desde nosotros mismos, por lo que en ALTO estamos convencidos de que no es imposible hacer lo correcto, quizá es más complejo, costoso o lento, pero no imposible.
Si quieres asesoría para crear una comunidad segura, contáctanos: https://www.alto-company.com/.