Gracias al crecimiento de la compra online han aparecido procesos de compra como el BOPIS (buy-online, pick-up-in-store) y el BORIS (buy-online, return-in-store). Estos nuevos métodos mejoran la experiencia del usuario, en que fusionan las ventajas del entorno físico (facilidad de devolución e inmediatez de compra) con las del entorno digital. Lo que da un valor […]
Gracias al crecimiento de la compra online han aparecido procesos de compra como el BOPIS (buy-online, pick-up-in-store) y el BORIS (buy-online, return-in-store). Estos nuevos métodos mejoran la experiencia del usuario, en que fusionan las ventajas del entorno físico (facilidad de devolución e inmediatez de compra) con las del entorno digital. Lo que da un valor añadido al negocio y aumenta la competitividad del comercio físico.
Lamentablemente, abren nuevas posibilidades para los defraudadores, que, aprovechándose de la implementación de estos sistemas y del desconocimiento de los trabajadores en relación a su funcionamiento, buscan sacar beneficio.
Algunos de los métodos que utilizan son los siguientes:
- La devolución de productos robados. El defraudador alega que el producto ha sido comprado online y lo devuelve sin tener el recibo.
- El “wardrobing”, que consiste en usar repetidas veces un producto comprado online antes de devolverlo en la tienda física.
- La devolución múltiple. La persona en cuestión compra un producto online y lo devuelve. Luego devuelve, con el mismo recibo, un producto igual al anterior robado en otro establecimiento.
David Speights, de Appriss Retail, reconoce que los procesos de compra BOPIS Y BORIS crean nuevos problemas de seguridad que los negocios tendrán que tratar, aunque afirma que la oportunidad de mejorar la competitividad respecto al comercio por internet debe ser acogida y perfeccionada. Por último, añade que, a través de la recolección y la interpretación de datos mejorarán los sistemas de seguridad, tanto en el entorno físico como en el digital.
En ALTO te ofrecemos la posibilidad de recolectar la información necesaria para evitar, de antemano, posibles problemas con los defraudadores.