En el último año, diversas encuestas posicionan a la delincuencia como el tema más preocupante que afecta a toda la sociedad; siendo foco de análisis y gestión tanto del mundo público como del privado. Según cifras del Sistema Táctico de Operación Policial (STOP) de Carabineros, todos los delitos han crecido en comparación al mismo […]
En el último año, diversas encuestas posicionan a la delincuencia como el tema más preocupante que afecta a toda la sociedad; siendo foco de análisis y gestión tanto del mundo público como del privado.
Según cifras del Sistema Táctico de Operación Policial (STOP) de Carabineros, todos los delitos han crecido en comparación al mismo periodo del 2021, aunque la magnitud del aumento de la delincuencia no ha sido la misma para cada uno de ellos. Los robos han aumentado en un 61% y los homicidios en un 50%. Sin embargo, en Chile, está en deuda una acción fundamental para la prevención del delito.
La “cifra negra” de la delincuencia es el espejismo de la realidad que se configura a raíz de las denuncias formales. En 2012, la Organización de Naciones Unidas alertó qué en América Latina “no hay una cultura de la denuncia ciudadana”. En Chile, la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (ENUSC) muestra que la tasa de denuncias realizadas (propensión a denunciar) ha bordeando el 45% en los últimos años. Esto implica que, anualmente, alrededor del 55% de las víctimas de un delito se han abstenido de realizar la denuncia correspondiente.
El tema es que, si no se denuncia por los canales formales, se invisibilizan los fenómenos delictuales. Al no mostrar estos fenómenos, las autoridades no pueden tomar decisiones en base a los problemas que están ocurriendo. El hecho de no presentar una denuncia formal puede tener distintas causas. Muchas empresas -entendiendo que están formadas por personas- no denuncian los delitos, como hurtos o robos, sobre todo por un tema motivacional. Hay una especie de falla en las expectativas de los ciudadanos, quienes piensan que el sistema no funciona, en la puerta giratoria y que no vale la pena. Pero si no hay denuncias, el sistema y la inteligencia policial no funcionan correctamente.
Entonces, a medida que entren todas las denuncias a Carabineros, habrá más información; lo que se traduce en un mejor despliegue operativo y mayor prevención para que los delitos no vuelvan a ocurrir.
ALTO cuenta con la solución Alliance, un grupo de profesionales especializados en la protección de activos y persecución penal estratégica. Junto a su tecnología, Alliance permite realizar un adecuado análisis de riesgo de sus clientes, en base a toda la información recolectada, se pueden implementar políticas de seguridad y procedimientos de administración de riesgos efectivos. Todas las acciones internas deben ir acompañadas de denuncias que ayuden al actuar policial.
Eduardo Vergara, actual Subsecretario de Prevención del Delito, declaró al asumir su cargo que “desde el retorno a la democracia, Chile está viviendo el peor momento en materia de seguridad” y apuntó que el tema de la delincuencia “requiere de una articulación de una fuerza conjunta para enfrentar el fenómeno, avanzando hacia una mayor coordinación público-privada en seguridad”.
María de los Ángeles Kassis
Country Manager de ALTO Chile